Este artículo fue
publicado en una revista francesa en febrero de 1999. Gracias a
Sabrina, desde Francia, por compartirlo con nosotros.
El
gran éxito del "rey de los besos" lo obligó a
abandonar su país. Tarkan lo explica así: "¡Lo quiero
todo: fama y libertad!"
La primera
vez que vino a Francia, Tarkan apreció sobre todo el hecho de
que podía caminar por las calles sin ser reconocido. Pero, hoy
en día, con el éxito de "Simarik" y
"Sikidim", ¡también es una estrella en nuestro país!
¿Cómo maneja su repentina fama aquí? ¿Qué piensa de la vida
de una estrella? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas?
Confidencias que nos hizo en la confortable habitación de un
famoso hotel, el Carlton...
-En
el videclip de "Sikidim", estás escondido en un carro
porque te siguen cientos y cientos de fans. ¿Es alguna
experiencia que hayas vivido?
-Cuando salgo de una presentación en televisión o de un
concierto como el que dí en el Olimpia el 27 de enero, hay mucha
gente esperándome, y algunas veces debo ser escoltado por
guardaespaldas, para que no me destrozen en pedacitos [se ríe].
Pero aquí en Francia, aunque cada vez se me hace más y más
difícil pasar desapercibido, está bien. En Turquía, por el
contrario, la situación se salía de control.
-¿Cómo
así?
-Me
era imposible salir sin estar rodeado de una muchedumbre numerosa
y a veces histérica. Me era imposible salir con una chica a un
restaurante sin ser asediado por los paparazzis. Recuerdo en
particular una persecución en carro a gran velocidad que
realmente me asustó. Por supuesto, manejé como un as, ¡porque
dejé atrás a mis perseguidores! Pero cuando pienso en eso, me
doy cuenta de que podríamos habernos matado...
-Sin
embargo, cuando alguien tiene un trabajo como el tuyo, está
feliz de ser conocido, ¿no?
-Es verdad, esta atención hacia mi, ¿es el alimento de mi
espíritu? Vivo del amor que me dan mis fans. Es grandioso saber
que la gente te mira, y debo decir que me encanta que la gente me
reconozca cuando voy a restaurantes o discotecas. También es
agradable cuando te dan la mejor mesa. No haría un escándalo
para obtnerla, pero aprecio todas estas pequeñas ventajas que
trae la fama. Sin embargo, también hay algunas desventajas las
cuales no son muy agradables.
-¿Qué
es lo que más te molesta?
-Hay
dos cosas que me duelen. La primera, es ser acorralado como un
animal. Una vez yo estaba en vivo en la televisión turca con una
cámara detrás, ¡siguiéndome hasta la puerta del baño! Así,
pierdes toda tu libertad y también tu habilidad de crear.
Necesito estar en contacto con la realidad, conocer gente,
observar, conversar, como todos, para tener cosas que contar en
mis canciones. Esta vida era imposible para mi en Turquía, y
tenía que partir para vivir en cualquier otro lado. Por eso
escogí Nueva York, donde nadie me conoce.
-Hablabas
de dos puntos negativos, ¿cuál es el otro?
-Lo
segundo que es difícil algunas veces, es el hecho de que soy
malinterpretado. Recuerdo un gran concierto en mi país en donde
cantaba una canción muy sexy en la cual mis bailarines debían
quitarme la ropa (¡no toda, por supuesto!). Fue malinterpretado
y al día siguiente los medios de comunicación hicieron un
escándalo sobre eso. La prensa dijo que yo daba un mal ejemplo,
ya que soy considerado una persona provocadora, aunque esa no era
mi intención. Yo solo quería, al igual que mi público, darle
rienda suelta a mi juventud y divertirme sobre el escenario.
Estas críticas me hicieron daño en ese momento.
-Dinos
la parte buena de tu trabajo...
-Lo
que amo sobre todo, son los viajes que hago desde que soy famoso.
Es fantástico descubrir otros países, pero sobre todo conocer
otras culturas, comidas, gente...
-También
está el dinero, lo cual no es nada despreciable, ¿no?
-Mentiría
si dijera lo contrario. Como todo el mundo, prefiero tener dinero
a ser pobre. Pero no soy el tipo de persona que comprar montones
de casas por aquí y por allá. Tampoco tengo jet privado.
También les digo que en relación al dinero, no soy el más
razonable. Lo gasto todo en viajes y ropa. ¡Pero tienen que
perdonarme, todavía soy joven! [sonríe]
-Tengo
una pregunta cuya respuesta ya me la imagino, pero quiero
preguntártela...¿y si tuvieras que hacerlo todo de nuevo?
-Por supuesto lo haría de nuevo, ¡y hasta dos veces! No me
siento aburrido, por el contrario. Cada noche, cuando entro a mi
cuarto de hotel, le doy gracias a Dios por todo el amor que
recibo de mis fans. Y espero que me dure mucho tiempo...
Algunos
datos:
Aquí
está la prueba de que, aunque es famoso, Tarkan todavía
tiene un corazón sencillo. Mientras posaba en la sesión
fotográfica, compró un pequeño arete azul en...14
francos (un poquito menos de 2 dólares), ¡y eso lo hizo
el hombre más feliz!
"Didi",
la canción de Khaled, es en realidad un cover
de "Kimdi", la canción de Tarkan.
Cuando
está hospedado en un hotel que tiene gimnasio, él va
allí en su tiempo libre para relajarse.
Por
último...¿Sabían que Tarkan, la estrella, es súper
dulce y buena gente? ¡Mejor que él, no encontrarán a
nadie!